domingo, 6 de febrero de 2011

Quiero ser futbolista



Cuando era pequeño me preocupaba que todos los niños de clase, cuando fueran mayores, querían ser futbolistas. De hecho, hablaba con algunos para convencerles de que se hicieran médicos o pilotos de avión para no dejar puestos vacantes en esas profesiones que veía tan importantes. Y me preguntaba si no sería yo el único tonto que había elegido balonmano en vez de fútbol, condenándome a una vida en el ostracismo. Luego, con el paso del tiempo, te vas dando cuenta de que eso de ser futbolista realmente era una tontería.


Pero, hace poco, leí en el As el fichaje de Fernando Torres por el Chelsea (van terceros en la liga de fútbol inglesa). No es lo que hayan pagado por él en esta época (50ytantos millones) sino lo que va a cobrar el Niño: 234.000€ a la semana. A la semana.


Luego sigo leyendo hasta las últimas páginas donde (con suerte) se habla de balonmano y veo una única noticia: los jugadores del Granollers (van terceros en la liga de balonmano) como medida de protesta por los 2 meses y medio que llevan sin cobrar, no se afeitarán la barba. ¿Cuánto pueden llegar a cobrar 18 jugadores por 2 meses y medio de trabajo? 209.000€.


Y luego me pongo a pensar en lo que, personalmente, me viene encima cuando acabe la universidad: 6 méses de contratos en prácticas, otros 6 cobrando unos 150-200€ al mes, quizás alguno en el paro, otros cobrando en B, aguantar unas cuantas horas de más en las agencias...


Vaya, que al final cuando eres pequeño no eres tan tonto pensando en querer ser futbolista...

viernes, 4 de febrero de 2011

Parecidos razonables



¿No os ha pasado de ir a saludar a alguien y cuando estés al lado, darte cuenta que esa no es la persona que pensabas?


Últimamente me lleva pasando eso muchas veces. No se si achacarlo al aumento de mi ceguera, a que se me reblandece el cerebro por las pocas horas que echo al estudio, o a las ganas de tener nuevos amigos accidentales.


Pero es que hay otras veces que realmente la persona que piensas, y la que ves, se parecen muchisimo, y eso es lo que me pasó el otro día viendo Como conocí a vuestra madre, que desde el primer capítulo estaba convencido que Barney estaba interpretado por el mismo actor que hacía de hermano mayor en Malcolm in the middle, hasta que San Google me sacó del engaño... ¡Con lo feliz que he sido viendo Malcolm y pensar que ahora están todos en el paro..!